14 de febrero de 2012

España cuna del anticristo

    

     Hacía pocas días que yo había llegado de España y curiosamente en una zona de Santo Domingo me encontré con este cartel. Como podéis entender, el contenido me sorprendió muchísimo y no puedo quedarme sin comentarlo y decir lo que pienso.
     Es común encontrarse por estas tierras mensajes apocalípticos del fin de los tiempos, de desgracias que van a acontecer, de maldiciones que vendrán, etc..., pero hasta ahora nunca me había encontrado con algo tan ridículo y ofensivo.
     En primer lugar, creo que pensar en que hay un anticristo, una bestia, es no saber interpretar los datos bíblicos y no saber contrastar con un mínimo de conocimiento lo que la Biblia dice. Ya ocurrió con Galileo, con Miguel Servet, y tantos otros que por contradecir las enseñanzas bíblicas o poner en cuestión algunas cosas que la ciencia demostraba fueron condenados. Todavía, por desgracia, hay gente que no sabe interpretar la Palabra de Dios y la lee de forma literal. El Apocalipsis como el Libro de Daniel son libros apocalíticos que encierran en sí un lenguaje simbólico que hay que descifrar.
     En segundo lugar, me parece que decir que el Anticristo nacerá en España es una afirmación un tanto atrevida. ¿Qué pasa, en el Libro de Daniel pone que será España la cuna del Anticristo? ¡Qué ridículo! Algunos van buscando e identificando al Anticristo por muchos sitios, y quizá lo lleven dentro. Que se hagan un chequeo.
     Y en tercer lugar, el famoso verichip, que es un microchip que se instala en personas y sirve como identificador (al estilo de un código de barras) no puede identificarse con el Anticristo, es algo que ha creado la ciencia y que desde planteamientos morales debe abordarse. Pensar que ahí se esconde el Anticristo es algo irrisorio.
     No sé quién está detrás de este cartel, cuál es la organización que pone este tipo de anuncios, pero es una pena que pierdan el tiempo en estas cosas, cuando podrían darse otros mensajes más positivos y constructivos.

1 comentario:

  1. Cada vez que mi mamá y yo pasamos frente a ese letrero nos llegan a la cabeza nuestros padrecitos mercedarios y siempre venía la interrogante: Qué pensaran de este letrero/ ¡Gracias por la respuesta! ¡jajajaja!

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